jueves, 24 de octubre de 2013

Nuestra familia, objetivo de oración

Luego, mientras revisaba la situación, reuní a los nobles y a los demás del pueblo y les dije: ¡No le tengan miedo al enemigo! ¡Recuerden al Señor, quien es grande y glorioso, y luchen por sus hermanos, sus hijos, sus hijas, sus esposas y sus casas! Nehemías 4:14.

Luchar por nuestra familia es estar vigilante ante las estrategias del enemigo, no nos cansemos de clamar por ellos; porque sabemos muy bien quien es nuestro Dios, y en quien hemos confiado, Él nunca nos dejará y nunca nos desamparará, al igual que a nuestra familia.  

Pero el Señor está conmigo como un guerrero poderoso; por eso los que me persiguen caerán y no podrán prevalecer, fracasarán y quedarán avergonzados. Eterna será su deshonra; jamás será olvidada. Jeremías 20:11

Bendiciones