jueves, 9 de febrero de 2012

Nuestro servicio a Dios

Marcos 10:45
"Porque el Hijo del Hombre tampoco vino para ser servido, sino para servir, y dar su vida en rescate por muchos"

Qué bueno es seguir los pasos de Jesús, servir, y dar su vida por cada uno de nosotros. ¡Oh Dios que grande es tú amor!
Este ejemplo es de gran relevancia para nuestras vidas, es un gran estímulo para servir incondicionalmente; nuestro servicio a Dios no tiene precio, debe ser por amor, en gratitud, por haber dado su vida por la nuestra. 

Dios les bendiga.